Consejas y consejos del viejo Casimiro.- No es extraño en un Estado en que las grandes empresas utilizan a la casta política para amortiguar el impacto de sus sinvergüenzuras de cara a la población indefensa, aborregada e indemne, que sucedan cortes de luz como el que entre este domingo en la noche y la mañana del lunes han afectado a algunos sectores de Terrassa, sin que nada ni nadie se responsabilice ni busque responsables de los estropicios que ocasionan estas incidencias.
Efectivamente desde anoche, micro cortes de energía eléctrica anunciaron que algo ocurría en algún sitio, solo unos días después de conocer que las empresas dueñas de la energía en connivencia con la casta política como siempre ha ocurrido, habían aumentado ni más ni menos que un 8 por ciento la factura de la luz.
Estos micro cortes, sin embargo, se convirtieron la mañana de este lunes en un corte de una hora y pico, con indicios de arranque en varias ocasiones, que hicieron que los aparatos electrónicos sufrieran lo indecible para no quedar inutilizados, los que no quedaron inutilizados.
Es de esperar que el ayuntamiento local exija responsabilidades e indemnizaciones en los casos que hubiera indicios para ello, porque no se trata de robar por el suministro y tener unos equipos incapaces de solventar una mayor demanda de energía debido a los altos calores.
Así es la vida. Así son y así están las cosas.
Efectivamente desde anoche, micro cortes de energía eléctrica anunciaron que algo ocurría en algún sitio, solo unos días después de conocer que las empresas dueñas de la energía en connivencia con la casta política como siempre ha ocurrido, habían aumentado ni más ni menos que un 8 por ciento la factura de la luz.
Estos micro cortes, sin embargo, se convirtieron la mañana de este lunes en un corte de una hora y pico, con indicios de arranque en varias ocasiones, que hicieron que los aparatos electrónicos sufrieran lo indecible para no quedar inutilizados, los que no quedaron inutilizados.
Es de esperar que el ayuntamiento local exija responsabilidades e indemnizaciones en los casos que hubiera indicios para ello, porque no se trata de robar por el suministro y tener unos equipos incapaces de solventar una mayor demanda de energía debido a los altos calores.
Así es la vida. Así son y así están las cosas.