De nada sirvió el tempranero gol de Marc Vilajosana en el min. 16 que parecía ser el inicio de la confirmación de una nueva victoria egarense, puesto que el Figueres que en el papel parecía un rival fácil de superar, le endosó en los siguientes minutos tres goles que acabaron con las esperanzas del Terrassa de rozar los puestos de ascenso.
Sin embargo, esta derrota solamente parece ser la excepción que confirma la regla de que los de casa conforman un gran equipo que esta temporada puede dar una gran ilusión a su afición. Debemos recordar que por muy bueno que se sea, no siempre se gana. Queda mucha liga y sobra la calidad.
Sin embargo, esta derrota solamente parece ser la excepción que confirma la regla de que los de casa conforman un gran equipo que esta temporada puede dar una gran ilusión a su afición. Debemos recordar que por muy bueno que se sea, no siempre se gana. Queda mucha liga y sobra la calidad.