Consejas y consejos del viejo Casimiro.- La derecha catalana que con su nefasto e inepto Artur Mas a la cabeza se ha olvidado de gobernar como no sea para recortar, puede lograr que el Hospital Mútua de Terrassa sea el único centro hospitalario, de los tres referentes en Catalunya del Código Infarto, que siga operando a tiempo parcial en la atención a los infartados.
Gracias a los recortes de estos rancios conservadores que tienen el inestimable apoyo de una ERC que no sabemos dónde encaja el nombre de Esquerra y a quienes poco les importa gobernar sino tener plazas en el gobierno, tres hospitales de referencia, incluído el local, tienen horarios parciales como si este serio asunto de los infartos fuese voluntario.
Ya se sabe que en Navidad la triste burguesía gobernante se pudo anotar una víctima a sus espaldas al morir un paciente con infarto por encontrarse cerrado el servicio de hemodinámica del Hospital Juan XXIII de Tarragona que opera solamente medio día.
En esta fecha y con el cadáver imposible de resucitar y sin ningún responsable, los aventajados discípulos de Jordi Pujol han decidido que ese servicio vuelva a operar 24 horas al día todos los días del año. Posiblemente los hospitales de Girona y Lleida se vean también beneficiados.
Sin embargo, de la Mútua no se dice nada, por lo que de momento es recomendable que los terrassenses se abstengan de sufrir infartos, porque no podrán ser atendidos entre las doce de la noche y las doce del mediodía ni tampoco sábados y domingos.
Los médicos, naturalmente a través de su sindicato catalán, exigen que los tres hospitales de referencia que de momento cuentan con unidades de hemodinámica a tiempo parcial amplíen sus horarios a 24 horas. Así nos lo contaba este martes la televisión local.
Todo esto me trae a la memoria que hace mucho tiempo, creo que en Brasil, como respuesta a la idiotez de sus políticos, los ciudadanos votaron a un burro para gobernador y esto hizo reir a todo el mundo. En Cataluña, sin embargo nadie tiene ánimos ni para sonreir.
Así es la vida. Asi son y así están las cosas.
Gracias a los recortes de estos rancios conservadores que tienen el inestimable apoyo de una ERC que no sabemos dónde encaja el nombre de Esquerra y a quienes poco les importa gobernar sino tener plazas en el gobierno, tres hospitales de referencia, incluído el local, tienen horarios parciales como si este serio asunto de los infartos fuese voluntario.
Ya se sabe que en Navidad la triste burguesía gobernante se pudo anotar una víctima a sus espaldas al morir un paciente con infarto por encontrarse cerrado el servicio de hemodinámica del Hospital Juan XXIII de Tarragona que opera solamente medio día.
En esta fecha y con el cadáver imposible de resucitar y sin ningún responsable, los aventajados discípulos de Jordi Pujol han decidido que ese servicio vuelva a operar 24 horas al día todos los días del año. Posiblemente los hospitales de Girona y Lleida se vean también beneficiados.
Sin embargo, de la Mútua no se dice nada, por lo que de momento es recomendable que los terrassenses se abstengan de sufrir infartos, porque no podrán ser atendidos entre las doce de la noche y las doce del mediodía ni tampoco sábados y domingos.
Los médicos, naturalmente a través de su sindicato catalán, exigen que los tres hospitales de referencia que de momento cuentan con unidades de hemodinámica a tiempo parcial amplíen sus horarios a 24 horas. Así nos lo contaba este martes la televisión local.
Todo esto me trae a la memoria que hace mucho tiempo, creo que en Brasil, como respuesta a la idiotez de sus políticos, los ciudadanos votaron a un burro para gobernador y esto hizo reir a todo el mundo. En Cataluña, sin embargo nadie tiene ánimos ni para sonreir.
Así es la vida. Asi son y así están las cosas.