Así ha quedado reflejado este miércoles a través de un mensaje público, vía Facebook , que el hombre cuyo nombre omitimos por la ola de incredulidad y asombro que han generado sus palabras, ha dirigido a Jordi Ballart, alcalde de Terrassa.
El sujeto que considera que la plaza es de su propiedad sostiene que "me parece bien que hagas reformas en los parques, pero ahora los habeis echo en el mio el de can roca, vais a poner una zona de entreno para 5 chicos que van sin camisas"... ¡Ya las liamos! no le gustan los chavales descamisados (en Argentina, durante la época de Evita ser un descamisado era todo un orgullo)... Pero para que no haya equívocos, no es por él esa molestia por los descamisados, porque "es por donde van a jugar niñas de 5 a 16 años".Esto me hace presumir que este pío caballero debe proyectar si no lo ha hecho ya, una recogida de firmas para obligar que en las playas y piscinas, los varones de cualquier edad, cubran sus pecaminosos pechos.
Sin embargo, la misiva del "protestante" llega a su límite al negar toda implicación racista o xenófoba; "me hes igual la nacionalidad de los chavales" Ese en un punto que si le diera igual ni siquiera lo habría mencionado ¡Madre mía!
Después como para justificar el mensaje el hombre afirma que era más urgente tapar los agujeros que tiene el césped donde "juegan nuestros niños"
Pero al final, parece ser otro el motivo de la acumulación de despropósitos, cuando reconoce que todo lo anterior es "sin contar el daño que se le hace al terrassasport y alas personas que nos dedicamos al mundo del fitness.o sea preparadores físicos".
Así es la vida. Así son y así están las cosas.
Nota: las citas del vecino no han sido traducidas porque Google no traduce los errores ortográficos, y se han copiado textuales.