Con un claro coqueteo entre el PSC de Ballart y el PP que en su versión nativa se hace llamar Covergencia Demnocrática de Catalunya (CDC), se escenificó este jueves el primer pleno extraordinario del nuevo consistorio egarense.
Este hecho que puede marcar la ruta de los próximos cuatro años o lo que la oposición mayoritaria decida, fue más importante por el significado derechizador que tendría en la límea de gobierno local, que la irrisoria rebaja de un 5 por ciento en el sueldo del alcalde, toda una burla a las decenas de miles de terrassenses que no superan los mil euros mensuales de ingresos, sin contar los que malviven con menos o nada. Los concejales delegados, posiblemente para evitar entrar en el umbral de la pobreza, solamente se rebajaron sus devengos, en un 3 por ciento.
Apoyo de la burguesía local a cambio de ser un municipio por la independencia.
Los conservadores locales, según parece, habrían transado su apoyo a los nueve concejales del PSC a cambio de que este municipio se sume a los que se declaran abiertamente independentistas, lo que significaría desdeñar a la base ciudadana del PSC que en el tema soberanista no va más allá del derecho a decidir.
Este vaivén inicial podría significar que lejos de la prometida nueva forma de hacer política, los viejos usos se consolidan, así como la izquierda emergente que pasará a ocupar la posición de un PSC sin rumbo, sin ideas, ni menos ideología..
Así es la vida. Así son y así están las cosas
Este hecho que puede marcar la ruta de los próximos cuatro años o lo que la oposición mayoritaria decida, fue más importante por el significado derechizador que tendría en la límea de gobierno local, que la irrisoria rebaja de un 5 por ciento en el sueldo del alcalde, toda una burla a las decenas de miles de terrassenses que no superan los mil euros mensuales de ingresos, sin contar los que malviven con menos o nada. Los concejales delegados, posiblemente para evitar entrar en el umbral de la pobreza, solamente se rebajaron sus devengos, en un 3 por ciento.
Apoyo de la burguesía local a cambio de ser un municipio por la independencia.
Los conservadores locales, según parece, habrían transado su apoyo a los nueve concejales del PSC a cambio de que este municipio se sume a los que se declaran abiertamente independentistas, lo que significaría desdeñar a la base ciudadana del PSC que en el tema soberanista no va más allá del derecho a decidir.
Este vaivén inicial podría significar que lejos de la prometida nueva forma de hacer política, los viejos usos se consolidan, así como la izquierda emergente que pasará a ocupar la posición de un PSC sin rumbo, sin ideas, ni menos ideología..
Así es la vida. Así son y así están las cosas