Se benefician de la extrema flexibilidad de la justicia hispana cuando no se trata de deudas a bancos
Los detenidos por la policía y liberados por un dios de la justicia boba, son vecinos de Terrassa, Sabadell y Barcelona
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Nota de Prensa.- Agentes de la Policía de la Generalitat - Mossos d'Esquadra de la Unidad de Investigación de la Comisaría de Cerdanyola detuvieron, entre los días 30 de junio y 1 de julio, cinco jóvenes, cuatro chicos y una chica, como presuntos autores de seis delitos de robo con violencia e intimidación. Los detenidos, de nacionalidad marroquí y española, tienen entre 18 y 21 años y domicilio en Sabadell, Terrassa y Barcelona.
La investigación comenzó el 13 de junio cuando la Policía Local de Barberá del Vallés recibió seis denuncias por robo con violencia e intimidación en el interior y alrededores de una discoteca de la localidad. Los agentes se desplazaron al lugar de los hechos y localizaron cuatro jóvenes que coincidían con la descripción de las víctimas.
A partir de los hechos denunciados, los Mossos determinaron que un grupo de cinco jóvenes robó teléfonos móviles y dinero a seis menores de edad con intimidación verbal y física, si era necesario. De hecho, los detenidos planificaban los robos y buscaban las víctimas más vulnerables y con poca capacidad de defenderse.
Los delitos se produjeron de madrugada, entre la una y las cinco, horario en que la discoteca estaba abierta. Después de conseguir su objetivo, los supuestos autores de los hechos, venían los móviles sustraídos en el mercado negro.
Los detenidos pasaron a disposición judicial el 3 de julio y el juez decretó la libertad con cargos para cuatro de ellos, mientras que el quinto ingresó en prisión. La investigación continúa abierta.
Los detenidos por la policía y liberados por un dios de la justicia boba, son vecinos de Terrassa, Sabadell y Barcelona
La investigación comenzó el 13 de junio cuando la Policía Local de Barberá del Vallés recibió seis denuncias por robo con violencia e intimidación en el interior y alrededores de una discoteca de la localidad. Los agentes se desplazaron al lugar de los hechos y localizaron cuatro jóvenes que coincidían con la descripción de las víctimas.
A partir de los hechos denunciados, los Mossos determinaron que un grupo de cinco jóvenes robó teléfonos móviles y dinero a seis menores de edad con intimidación verbal y física, si era necesario. De hecho, los detenidos planificaban los robos y buscaban las víctimas más vulnerables y con poca capacidad de defenderse.
Los delitos se produjeron de madrugada, entre la una y las cinco, horario en que la discoteca estaba abierta. Después de conseguir su objetivo, los supuestos autores de los hechos, venían los móviles sustraídos en el mercado negro.
Los detenidos pasaron a disposición judicial el 3 de julio y el juez decretó la libertad con cargos para cuatro de ellos, mientras que el quinto ingresó en prisión. La investigación continúa abierta.