Desde hace algún tiempo el Ayuntamiento organiza visitas guiadas para observar las voltes (bóvedas) de uno de los principales monumentos modernistas de Terrrassa: la Masía Freixa. Sin duda una perspectiva diferente de abordar dicho edificio, construido por Lluís Muncunill, primero como fábrica y posteriormente como vivienda de la familia del industrial Josep Freixa i Argemí. Sus formas sinuosas y el uso de los arcos parabólicos son las características principales de este edificio, del que llama poderosamente la atención su cubierta ondulada y su torre en forma de minarete.
La visita a dicha cubierta permite apreciar desde arriba el juego de ondulaciones que realizan las bóvedas concebidas por Muncunill, que se asemeja a un mar batido en tonos grises. El arquitecto recurrió a la típica bóveda catalana de ladrillo plano, a la que imprimió un carácter modernista con el uso de nuevos materiales. Así, al revestimiento de mortero empleado exteriormente le añadió cristales incrustados que brillan con la luz del sol.
La visita para poder contemplar ese mar gris permite asimismo acceder a las estancias que se construyeron sobre la antigua fábrica, en las que se ubicaban las cocinas y una habitación de juegos infantiles para la familia del industrial. También se puede observar otra perspectiva de la torre más próxima. Ésta es de base octogonal y cuenta con cuatro niveles, el último rodeado por una balconada que hace las veces de mirador. (José Luis Montoya / ARQUITERRASSA)
La visita a dicha cubierta permite apreciar desde arriba el juego de ondulaciones que realizan las bóvedas concebidas por Muncunill, que se asemeja a un mar batido en tonos grises. El arquitecto recurrió a la típica bóveda catalana de ladrillo plano, a la que imprimió un carácter modernista con el uso de nuevos materiales. Así, al revestimiento de mortero empleado exteriormente le añadió cristales incrustados que brillan con la luz del sol.
La visita para poder contemplar ese mar gris permite asimismo acceder a las estancias que se construyeron sobre la antigua fábrica, en las que se ubicaban las cocinas y una habitación de juegos infantiles para la familia del industrial. También se puede observar otra perspectiva de la torre más próxima. Ésta es de base octogonal y cuenta con cuatro niveles, el último rodeado por una balconada que hace las veces de mirador. (José Luis Montoya / ARQUITERRASSA)