Nota de prensa.- El Ayuntamiento de Terrassa comenzará el próximo lunes, 9 de noviembre, la tercera fase de las obras de reurbanización de la calle de Provenza, una actuación que tiene el objetivo de regenerar esta calle y, de este modo, contribuir a revitalizar el barrio de San Pedro Norte, mejorando la calidad urbana y la conexión con el resto de la ciudad, además de dinamizar la actividad comercial de la zona. La tercera fase, que abarcará el tramo que va desde la calle Ancha hasta la calle de la Poetisa Caparà, pondrá el punto final a un proyecto que se empezó a ejecutar en marzo de 2013.
La intervención en este tercer tramo mantendrá coherencia y continuidad con las obras realizadas en las dos fases precedentes. Esto significa que, una vez finalicen los trabajos, la calle Provenza habrá convertido en un bulevar con aceras anchas y adecuadas para los peatones y con un tráfico pacificado.
Este tramo de calle cambiará su aspecto: con aceras de cuatro metros de ancho, cruces pensadas como espacios de encuentro, con bancos y arbolado; mientras que la calzada destinada al tráfico tendrá un carril de circulación en sentido sur y un carril bici en sentido norte, así como una hilera de aparcamientos. Además, el cruce con la calle de Bartrina se elevará para pacificar el tráfico y reducir la velocidad de los vehículos que circulen, además de facilitar el acceso de los peatones.
Las obras en la calle se aprovecharán para mejorar la red de alumbrado, eliminando los postes y enterrando los cables en los cruces, además de renovar y modernizar diferentes elementos de la red para ganar en eficiencia y reducir el consumo. También se mejorarán otros servicios que actualmente presentan algunas deficiencias, tales como la red de alcantarillado y la de agua potable.
Aunque la planificación de los trabajos no prevé el corte de la calle durante los cinco meses de duración de las obras, es inevitable que los trabajos generen una afectación al tráfico. Mientras duren las obras, no se podrá estacionar en el tramo afectado, y por otra parte, la presencia de los operarios y la maquinaria hará más estrecho el carril de circulación. Del mismo modo, se pueden producir cortes puntuales, por ejemplo, para la ejecución de zanjas transversales y de los trabajos de asfaltado. Con todo, la planificación se ha hecho pensando en minimizar las molestias para el vecindario y los usuarios y usuarias habituales tendrán garantizado el acceso a sus parkings.
La tercera fase de la reurbanización de la calle de Provenza tiene un plazo de ejecución de cinco meses y cuenta con un presupuesto de adjudicación de 357.514,49 euros. Los trabajos se han encargado a la empresa Constraula Ingeniería y Obras, SAU, tras el correspondiente concurso.
La urbanización de la calle de Provenza tiene su origen en el proceso de participación ciudadana en el presupuesto municipal de inversiones para el periodo 2008-2011, en el que la ciudadanía decidió cómo invertir cuatro millones de euros. Esta fue una de las propuestas ganadoras de la votación. El vecindario de la calle de Provenza ha participado tanto en la selección como en el diseño del proyecto, así como en la elección de materiales y elementos de mobiliario urbano. Actualmente, hay constituida una comisión de seguimiento integrada por asociaciones vecinales, representantes de los comerciantes y el Ayuntamiento. Las obras, que se proyectaron en tres fases, comenzaron en marzo de 2013. Hasta ahora, la renovación abarcaba desde la avenida de Béjar hasta la calle Ancha. Con esta tercera fase, que afecta a casi 3.000 metros cuadrados, se habrá ejecutado la renovación de una superficie de unos 14.000 metros cuadrados. La nueva configuración de la calle no sólo adapta su aspecto a su función comercial, sino que además facilita la articulación del barrio de San Pedro Norte en sentido norte-sur y su conexión con el resto de la ciudad.
La intervención en este tercer tramo mantendrá coherencia y continuidad con las obras realizadas en las dos fases precedentes. Esto significa que, una vez finalicen los trabajos, la calle Provenza habrá convertido en un bulevar con aceras anchas y adecuadas para los peatones y con un tráfico pacificado.
Este tramo de calle cambiará su aspecto: con aceras de cuatro metros de ancho, cruces pensadas como espacios de encuentro, con bancos y arbolado; mientras que la calzada destinada al tráfico tendrá un carril de circulación en sentido sur y un carril bici en sentido norte, así como una hilera de aparcamientos. Además, el cruce con la calle de Bartrina se elevará para pacificar el tráfico y reducir la velocidad de los vehículos que circulen, además de facilitar el acceso de los peatones.
Las obras en la calle se aprovecharán para mejorar la red de alumbrado, eliminando los postes y enterrando los cables en los cruces, además de renovar y modernizar diferentes elementos de la red para ganar en eficiencia y reducir el consumo. También se mejorarán otros servicios que actualmente presentan algunas deficiencias, tales como la red de alcantarillado y la de agua potable.
Aunque la planificación de los trabajos no prevé el corte de la calle durante los cinco meses de duración de las obras, es inevitable que los trabajos generen una afectación al tráfico. Mientras duren las obras, no se podrá estacionar en el tramo afectado, y por otra parte, la presencia de los operarios y la maquinaria hará más estrecho el carril de circulación. Del mismo modo, se pueden producir cortes puntuales, por ejemplo, para la ejecución de zanjas transversales y de los trabajos de asfaltado. Con todo, la planificación se ha hecho pensando en minimizar las molestias para el vecindario y los usuarios y usuarias habituales tendrán garantizado el acceso a sus parkings.
La tercera fase de la reurbanización de la calle de Provenza tiene un plazo de ejecución de cinco meses y cuenta con un presupuesto de adjudicación de 357.514,49 euros. Los trabajos se han encargado a la empresa Constraula Ingeniería y Obras, SAU, tras el correspondiente concurso.
La urbanización de la calle de Provenza tiene su origen en el proceso de participación ciudadana en el presupuesto municipal de inversiones para el periodo 2008-2011, en el que la ciudadanía decidió cómo invertir cuatro millones de euros. Esta fue una de las propuestas ganadoras de la votación. El vecindario de la calle de Provenza ha participado tanto en la selección como en el diseño del proyecto, así como en la elección de materiales y elementos de mobiliario urbano. Actualmente, hay constituida una comisión de seguimiento integrada por asociaciones vecinales, representantes de los comerciantes y el Ayuntamiento. Las obras, que se proyectaron en tres fases, comenzaron en marzo de 2013. Hasta ahora, la renovación abarcaba desde la avenida de Béjar hasta la calle Ancha. Con esta tercera fase, que afecta a casi 3.000 metros cuadrados, se habrá ejecutado la renovación de una superficie de unos 14.000 metros cuadrados. La nueva configuración de la calle no sólo adapta su aspecto a su función comercial, sino que además facilita la articulación del barrio de San Pedro Norte en sentido norte-sur y su conexión con el resto de la ciudad.