Nota de Prensa.- Los centros municipales de invierno que organiza el Ayuntamiento de Terrassa en colaboración con ocho entidades de ocio de la ciudad como el Esplai Ca n'Aurell, el Esparcimiento Tremola de Vilardell, el Centro de Ocio tú Tries, el Insoc Guadalhorce, La Fábrica de Can Tusell, el Esparcimiento Can Palet, el Grupo de Colonias de Ca n'Anglada y La Eina Cooperativa de Torre-sana, acogen un total de 460 niños. De ellos, 390 están becados por el Consistorio, a petición de Servicios Sociales, lo que supone el 85% del total de usuarios. Se trata de niños y niñas y adolescentes que se encuentran en situación de vulnerabilidad y que ya disponen de becas durante su escolarización. El Ayuntamiento ha invertido este año 79,571 euros, lo que representa un incremento del 80,8% de los presupuesto respecto al año anterior.
Este incremento presupuestario no se traduce en un incremento del número de usuarios (que en 2015 llegaron a 500, de los cuales 425 becados), sino en la ampliación del horario, con una jornada que de las 9 a las 17 horas, mientras que el año pasado sólo era de media jornada. También se ha ampliado de forma significativa la oferta de actividades lúdicas y educativas para los niños y jóvenes. Para el alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, "la integración y la igualdad de oportunidades para nuestros niños es uno de los ejes vertebradores de nuestra manera de entender la política y la ciudad. Por eso hemos decidido hacer un esfuerzo, de la mano de las entidades, para construir un casal normalizador, integrador. Queremos ser ambiciosos, porque no sólo es importante que nuestros niños tengan cubiertas sus necesidades alimenticias, sino que también lo es que puedan relacionarse con otros niños y niñas, jugar, salir de excursión y, en definitiva, convivir, sean o no usuarios de Servicios Sociales ".
Otra de las novedades de los centros de invierno es la implicación de las familias en las diferentes actividades que se organizan, como herramienta integradora. Desde el Consistorio se valora muy positivamente la implicación de las entidades de ocio de la ciudad, por el valor añadido que representa su conocimiento y experiencia en el trabajo con la infancia desde la educación en valores y para que faciliten la vinculación de los niños a la red social del territorio.
La duración de estos centros de invierno es de 10 días, entre el 22 de diciembre y el 7 de enero, y se dirigen a niños y adolescentes entre los 3 y los 17 años.
Recordemos que el Ayuntamiento de Terrassa, con la colaboración de cuatro entidades de ocio de la ciudad, ya amplió el pasado verano el dispositivo de atención social para niños en situación vulnerable y, por tercer año consecutivo, este dispositivo garantizó que los niños y niñas de familias sin recursos puedan cubrir las necesidades alimenticias, además de atención socioeducativa, durante el período que va desde el cierre de los centros de verano convencionales hasta el inicio del curso escolar. En cuanto a los centros de invierno, se pusieron en marcha a finales de 2013 y, desde entonces, el Ayuntamiento ha ido implementando mejoras para consolidar el proyecto.
Este incremento presupuestario no se traduce en un incremento del número de usuarios (que en 2015 llegaron a 500, de los cuales 425 becados), sino en la ampliación del horario, con una jornada que de las 9 a las 17 horas, mientras que el año pasado sólo era de media jornada. También se ha ampliado de forma significativa la oferta de actividades lúdicas y educativas para los niños y jóvenes. Para el alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, "la integración y la igualdad de oportunidades para nuestros niños es uno de los ejes vertebradores de nuestra manera de entender la política y la ciudad. Por eso hemos decidido hacer un esfuerzo, de la mano de las entidades, para construir un casal normalizador, integrador. Queremos ser ambiciosos, porque no sólo es importante que nuestros niños tengan cubiertas sus necesidades alimenticias, sino que también lo es que puedan relacionarse con otros niños y niñas, jugar, salir de excursión y, en definitiva, convivir, sean o no usuarios de Servicios Sociales ".
Otra de las novedades de los centros de invierno es la implicación de las familias en las diferentes actividades que se organizan, como herramienta integradora. Desde el Consistorio se valora muy positivamente la implicación de las entidades de ocio de la ciudad, por el valor añadido que representa su conocimiento y experiencia en el trabajo con la infancia desde la educación en valores y para que faciliten la vinculación de los niños a la red social del territorio.
La duración de estos centros de invierno es de 10 días, entre el 22 de diciembre y el 7 de enero, y se dirigen a niños y adolescentes entre los 3 y los 17 años.
Recordemos que el Ayuntamiento de Terrassa, con la colaboración de cuatro entidades de ocio de la ciudad, ya amplió el pasado verano el dispositivo de atención social para niños en situación vulnerable y, por tercer año consecutivo, este dispositivo garantizó que los niños y niñas de familias sin recursos puedan cubrir las necesidades alimenticias, además de atención socioeducativa, durante el período que va desde el cierre de los centros de verano convencionales hasta el inicio del curso escolar. En cuanto a los centros de invierno, se pusieron en marcha a finales de 2013 y, desde entonces, el Ayuntamiento ha ido implementando mejoras para consolidar el proyecto.