Los Mossos d'Esquadra de la Unidad de Investigación de la comisaría de Terrassa detuvieron, el 7 de agosto, un hombre, de 42 años, nacionalidad española y vecino de Terrassa, como presunto autor de tres robos con violencia e intimidación y una tentativa en una misma gasolinera de la capital vallesana.
La investigación se inició el 26 de junio cuando se cometió el primer robo, aunque posteriormente hubo dos más: el 16 y el 24 de julio. En los tres casos la descripción del agresor coincidía y el modus operandi también: el autor usaba un tapacubos para cubrir parcialmente la cara y evitar ser reconocido, llegaba a la gasolinera a pie y intimidaba a sus víctimas con un cuchillo de grandes dimensiones. La actuación siempre era muy rápida y no tocaba nada más fuera de los billetes que había en la caja registradora.
Fue el 7 de agosto cuando, finalmente, los Mossos detuvieron in fraganti al hombre en el momento en que intentaba robar en la misma gasolinera de nuevo. Los agentes recibieron un aviso y rápidamente se dirigieron al lugar y, tras atender a la víctima, con los datos de que disponían iniciaron una búsqueda del autor.
Los mossos localizaron el ladrón a pocos metros del lugar de los hechos. De hecho, el hombre estaba cerca de su domicilio que se encontraba a pocos metros de la gasolinera de modo que el permitía esconderse rápidamente después de cometer los robos.
El detenido, que acumula varios antecedentes por hechos de la misma tipología, pasó a disposición judicial el 9 de agosto ante el juzgado de guardia de Terrassa, que decretó su ingreso en prisión.
La investigación se inició el 26 de junio cuando se cometió el primer robo, aunque posteriormente hubo dos más: el 16 y el 24 de julio. En los tres casos la descripción del agresor coincidía y el modus operandi también: el autor usaba un tapacubos para cubrir parcialmente la cara y evitar ser reconocido, llegaba a la gasolinera a pie y intimidaba a sus víctimas con un cuchillo de grandes dimensiones. La actuación siempre era muy rápida y no tocaba nada más fuera de los billetes que había en la caja registradora.
Fue el 7 de agosto cuando, finalmente, los Mossos detuvieron in fraganti al hombre en el momento en que intentaba robar en la misma gasolinera de nuevo. Los agentes recibieron un aviso y rápidamente se dirigieron al lugar y, tras atender a la víctima, con los datos de que disponían iniciaron una búsqueda del autor.
Los mossos localizaron el ladrón a pocos metros del lugar de los hechos. De hecho, el hombre estaba cerca de su domicilio que se encontraba a pocos metros de la gasolinera de modo que el permitía esconderse rápidamente después de cometer los robos.
El detenido, que acumula varios antecedentes por hechos de la misma tipología, pasó a disposición judicial el 9 de agosto ante el juzgado de guardia de Terrassa, que decretó su ingreso en prisión.