El grupo está especializado en servicios de ginecología, obstetricia y reproducción asistida. Es referente en el territorio. Pero la crisis y los vaivenes en la cúpula han provocado que fuera incapaz de digerir una deuda que se acercaba a los siete millones de euros.
A partir de esta puja, Mútua de Terrassa deberá esperar unos diez días para conocer la decisión del juez que a su vez está a la espera que puedan aparecer otras empresas interesadas en el grupo.
Lo cierto es que Salus XXI, al menos de momento, no desaparecerá.