La investigación se inició durante el pasado mes de enero de este año, cuando un hombre con el rostro oculto y un cuchillo en las manos intimidó un trabajador de un establecimiento de alimentación en la calle Faraday y sustrajo el dinero de la caja. Los investigadores únicamente contaban con una pequeña descripción del vehículo en que había huido el presunto atracador, facilitada por una testigo.
El análisis del sistema de grabación del establecimiento no aportó datos sobre la identidad del atracador, ya que éste iba completamente cubierto. Agentes del Grupo de Atracos de la comisaría de Terrassa efectuaron una batida por la localidad, localizando en días posteriores un vehículo que coincidía plenamente con lo que había sido visto en el robo, y las sospechas se centraron en su propietario, un vecino de Terrassa con numerosos antecedentes policiales por diversos hechos delictivos.
Mientras los agentes analizaban la información disponible y continuaban con las investigaciones para obtener indicios concluyentes, tuvieron conocimiento de un segundo atraco durante el mes de mayo, esta vez en un gran supermercado en la Avenida de Béjar y donde un hombre y una mujer armados con cuchillos sustrajeron más de dos mil euros de la recaudación. Una de las trabajadoras, en estado de gestación, tuvo que ser atendida por una crisis de angustia.
En esta ocasión los dos presuntos atracadores, hombre y mujer, llevaban el rostro oculto con pañuelos para dificultar su identificación. Los indicios y la información obtenida en este robo llevaron a los investigadores a la conclusión de que éste también había sido presuntamente perpetrado por la misma persona que en el caso del mes de enero, aunque esta vez había actuado en compañía de una mujer.
El dispositivo de seguimiento y control del sospechoso finalizó durante la segunda semana del mes de agosto, cuando los agentes detuvieron al hombre e intervinieron el vehículo que utilizaba para cometer los atracos.
Los investigadores llevaron a cabo un registro en el domicilio del detenido con autorización judicial y localizar nuevos indicios, los cuales permitieron imputar al detenido otro atraco a un comercio de Terrassa durante el mes de diciembre del año pasado.
Sin embargo, la investigación posterior también pudo determinar que el detenido habría participado durante el mes de agosto de este año en un asalto violento a un ciudadano irlandés que se encontraba en Terrassa para participar en un torneo deportivo y al que, presuntamente, habría agredido y robado el teléfono móvil y tarjetas de crédito.
El detenido, que fue puesto a disposición judicial, ha ingresado de manera provisional a prisión. Los investigadores en la actualidad mantienen la investigación abierta para determinar si el detenido habría participado en otros atracos que se investigan y en busca de la mujer que acompañaba al detenido en uno de los atracos, de la que ya se conoce la identidad .