El planteamiento estético elegido para este local se basa en la nueva tendencia que revisita el pasado reciente desde el presente. Para ello recurre a elementos inspirados en décadas pretéritas, junto a otros auténticamente vintage. Nos ofrece un espacio totalmente ecléctico donde podemos encontrar desde el ambiente de corte industrial que tenía la zona en que se halla el local hasta un espacio cálido de inspiración norte-europea.
La Nova es un lugar para sentarse y degustar un buen aperitivo. No es de extrañar por ello que su propuesta decorativa confiera valor a sillas y taburetes. En ese sentido llama la atención el uso de los taburetes Podium, que últimamente se han puesto tan de moda; en este caso, en un color blanco que busca la neutralidad y el contraste con la madera del suelo (simulada), algunas paredes y las mesas. Junto a ellos, variedad de sillas, entre las que hallamos la clásica silla Bali vintage y sillas de cocina de los años setenta, entre otras propuestas.
Las lámparas bombilla, de gran simplicidad y efecto, contribuyen a rememorar ese ambiente urbano e industrial, al igual que los azulejos ingleses de color blanco que resaltan tramos de pared. (José Luis Montoya / ARQUITERRASSA)