El parking del Hospital de Terrassa es una canallada del que la gente no deja de hablar y que se pone en evidencia cada vez que alguien se enferma y debe ser ingresado en este hospital situado a las afueras de Terrassa. Nadie, ciertamente habla bien, pero como es natural, de esas protestas ningún político se hace eco... Total como a ellos con sueldos descarados y autoadjudicados en un extraño ejercicio de depravación democrática no les afecta y como mucha gente cuando va a votar, en una prueba palpable de la inmadurez política inyectada por los grandes partidos, no piensa más, que como forofo de un color político, sus cargos están bastante bien asegurados.
La cosa es que por esas cosas indeseables de la vida este miércoles tuvimos que acercarnos al hospital y no es que nos sorprendiera el parking, ,porque esta es una sinvergüenzura que lleva tiempo operando, si no la irritación que genera entre pacientes -los políticos de este país en una suerte maligna de sadismo tienen poca simpatía por los que tienen problemas de salud- y familiares el hecho de tener que pagar desde 1,80 euros la hora por acudir al centro sanitario.
Tocar el tema del aparcamiento privado fue para muchos olvidarse de sus males y echar por esas bocas las peores pestes contra los responsables de tamaña desfachatez, unas críticas centradas básicamente en los políticos...
"Vamos a ver, nos comentaba un hombre maduro"... Yo vengo a ver a mi mujer que está malita desde hace dos semanas y que la tienen que operar y se me van entre siete y diez euros cada día de aparcamiento".
Le recordamos que en el Hospital de la Mútua también hay un parking, a lo que una enfermera que pasaba por allí nos aclaró que "a la Mútua se puede llegar caminando según donde vivas o tienes otras opciones de aparcamiento, pero aquí no tienes más remedio que el coche o el transporte público y esta gente (suponemos que se refería a los cada vez más detestados políticos) pasa de todo esto..." Una señora que se unió al grupo en su silla de ruedas dedicó tal rosario de improperios a nuestros sacrificadísimos políticos, que, junto con los expresados por otras personas, son irreproducibles.
Pero eso no fue todo. Un paciente que salió de su habitación, nos invitó a mirar por la ventana para que observáramos la última morisqueta de algún responsable al que se le debe pedir la dimisión... Pero al asomarnos, no vimos más que el paisaje de siempre, a lo que el hombre que se veía bastante pachuchillo, soltó un apesadumbrado "jodeeeer" y luego nos explicó algo que habíamos visto pero que no llegamos a valorar en su asombrosa extensión..
"Estos granujas (sic) para evitar que la gente decente nos aparquemos cerca del hospital sin tener que llenarles sus bolsillos, sembraron de pivotes todos los arcenes del camino que trae aquí... Díme tú si eso no es una desfachatez"
"Y a mi marido antier se le llevaron el coche por dejarlo al lado de la carretera... ¡Malditos! (acotó una señora que estaba muy, pero que muy airada)
En resumen, que la gente no está contenta con el parking, porque es un atentado contra los enfermos y los pacientes, sin contar al personal sanitario...
Ni tampoco lo está con tener como única opción el taxi o el autobús, porque ambos son caros... Aunque eso es tema de otra nota.
La cosa es que por esas cosas indeseables de la vida este miércoles tuvimos que acercarnos al hospital y no es que nos sorprendiera el parking, ,porque esta es una sinvergüenzura que lleva tiempo operando, si no la irritación que genera entre pacientes -los políticos de este país en una suerte maligna de sadismo tienen poca simpatía por los que tienen problemas de salud- y familiares el hecho de tener que pagar desde 1,80 euros la hora por acudir al centro sanitario.
Tocar el tema del aparcamiento privado fue para muchos olvidarse de sus males y echar por esas bocas las peores pestes contra los responsables de tamaña desfachatez, unas críticas centradas básicamente en los políticos...
"Vamos a ver, nos comentaba un hombre maduro"... Yo vengo a ver a mi mujer que está malita desde hace dos semanas y que la tienen que operar y se me van entre siete y diez euros cada día de aparcamiento".
Le recordamos que en el Hospital de la Mútua también hay un parking, a lo que una enfermera que pasaba por allí nos aclaró que "a la Mútua se puede llegar caminando según donde vivas o tienes otras opciones de aparcamiento, pero aquí no tienes más remedio que el coche o el transporte público y esta gente (suponemos que se refería a los cada vez más detestados políticos) pasa de todo esto..." Una señora que se unió al grupo en su silla de ruedas dedicó tal rosario de improperios a nuestros sacrificadísimos políticos, que, junto con los expresados por otras personas, son irreproducibles.
Pero eso no fue todo. Un paciente que salió de su habitación, nos invitó a mirar por la ventana para que observáramos la última morisqueta de algún responsable al que se le debe pedir la dimisión... Pero al asomarnos, no vimos más que el paisaje de siempre, a lo que el hombre que se veía bastante pachuchillo, soltó un apesadumbrado "jodeeeer" y luego nos explicó algo que habíamos visto pero que no llegamos a valorar en su asombrosa extensión..
"Estos granujas (sic) para evitar que la gente decente nos aparquemos cerca del hospital sin tener que llenarles sus bolsillos, sembraron de pivotes todos los arcenes del camino que trae aquí... Díme tú si eso no es una desfachatez"
"Y a mi marido antier se le llevaron el coche por dejarlo al lado de la carretera... ¡Malditos! (acotó una señora que estaba muy, pero que muy airada)
En resumen, que la gente no está contenta con el parking, porque es un atentado contra los enfermos y los pacientes, sin contar al personal sanitario...
Ni tampoco lo está con tener como única opción el taxi o el autobús, porque ambos son caros... Aunque eso es tema de otra nota.