El sistema preventivo de conducción que se aplica a Terrassa se basa en un conjunto de sensores de visión colocados al exterior el vehículo, que identifican los principales factores de riesgo de accidente y que pueden pasar desapercibidos por la persona conductora. En caso de riesgo de impacto, se genera un aviso acústico y visual para generar una alerta y permitir a la persona conductora actuar en consecuencia.
Este sistema es especialmente útil para evitar los riesgos producidos en los ángulos ciegos del vehículo y en las situaciones de ángulos sin visión directa, como es el caso de los giros más pronunciados que hacen los autobuses.
Además, el sistema recoge de manera constante todas las alertas geolocalizadas que se generan, con lo cual se puede crear un mapa de riesgo de siniestralidad en la ciudad que permite diseñar actuaciones preventivas.
Balance en Terrassa
En estos 12 meses de funcionamiento, el sistema ha generado más de 28.000 alertas, que han evitado cualquier riesgo de accidente. Se han detectado alertas laterales activadas por los ángulos ciegos que tiene la persona conductora a la hora de circular, en puntos que se concentran en las zonas que tienen aceras estrechas donde el autobús tiene que hacer un giro pronunciado. Es lo que sucede, por ejemplo, en la plaza del Doctor Robert con la calle de San Antonio y también en la calle del Norte, en la rotonda de la Estación del Norte.
El sistema avanzado de asistencia a la conducción "Mobileye Shield +" ha permitido a TMESA tener conocimiento de las mejoras que, en cuanto a regulación de circulación o en el ámbito urbanístico, se pueden hacer para eliminar estas situaciones de riesgo.