Nota de prensa. - Los Mossos de la Unidad Central de Blanqueo de Capitales y del Área de Investigación Criminal de la Región Policial Metropolitana Norte, han detenido a cuatro personas por blanqueo de capitales y han imputado tres por falsificación documental, seis hombres y una mujer, de edades comprendidas entre los 26 y los 57 años, cuatro españoles, dos ucranianos y un ruso, como presuntos autores de un delito de blanqueo de capitales, falsificación documental y varios delitos contra el patrimonio.
La investigación se inició en 2013 cuando la policía detectó diversas partidas de mercancía procedentes de robos a camiones que eran ofrecidas a empresas relacionadas con el mundo de los centros de recogida.
El seguimiento de la mercancía permitió establecer que los ladrones vendían los productos a partir de diferentes sociedades sin actividad mercantil aparente, lo que levantó las sospechas policiales en relación con un posible entramado empresarial fraudulento creado para dar una aparente cobertura legal a la venta de mercancía sustraída.
La última carga sustraída recuperada por la policía fue de 265 cajas de cambio nuevas de vehículos valoradas en más de 500.000 €, almacenadas en un vertedero de Reus y que tenían origen en el robo de un camión en Terrassa
Un sofisticado entramado societario que ha dificultado la investigación policialEsta estructura empresarial había sido constituida de tal manera que el seguimiento de las operaciones comerciales relacionadas con la mercancía ilícita conducía a nuevas sociedades pantalla, con el objetivo evidente de dificultar la trazabilidad entre su origen y su último destino.
La sofisticación de esta trama societaria llegaba a tal extremo que en algunas ocasiones los investigadores pudieron acreditarse a través del estudio de los movimientos bancarios-flujos ficticios de dinero entre las empresas, con el fin de simular movimientos monetarios correspondientes a operaciones comerciales que, en realidad, no se llevaban a cabo.
En este sentido cabe destacar la complejidad en que se ha desarrollado la investigación, especialmente cuando ha sido necesario establecer la relación inequívoca entre el producto vendido al cliente final y el robo, ya que la mayoría de veces la mercancía pasaba por numerosas sociedades y / o intermediarios.
En el transcurso de la investigación los agentes pudieron identificar y localizar el testaferro que estaba directamente vinculado a la trama societaria investigada, formada por más de trece empresas. Esta persona ya tenía antecedentes por hechos similares y trabajaba con un gran número de clientes que habitualmente solicitaban los presuntos servicios de su sofisticada estructura empresarial
El circuito de la mercancía sustraídaLas averiguaciones policiales determinaron los diversos canales de distribución de la mercancía sustraída, así como de otros intermediarios que podían actuar de forma independiente o coordinada entre sí, en función de las dificultades que se planteaban para dar una salida segura a los productos.
El género sustraído estaba relacionado con el ámbito de los centros de recogida y las chatarrerías y el modus operandi de los robos se basaba, fundamentalmente, en las sustracciones de camiones enteros con su carga, que conducían posteriormente a lugares seguros, a la espera de localizar un eventual comprador interesado en la mercancía.
Una vez se disponía de un comprador, se concertaba el lugar y forma de la entrega de la carga y se contactaba con el testaferro, que facilitaba la facturación falsa necesaria para materializar la operación comercial a cambio de una sustanciosa comisión.
El operativo policial, que coordinó el Juzgado de instrucción núm. 3 de Sabadell, se llevó a cabo el pasado 3 de julio. Los investigadores realizaron cinco entradas y pesquisas en inmuebles y empresas de las localidades de Barcelona, Reus y Vilanova y la Geltrú, detuvieron a cuatro personas e imputaron tres más y se recuperaron más de 23 toneladas de mercancía sustraída.
Los agentes también han practicado requerimientos judiciales de documentación de naturaleza mercantil y comercial a seis sociedades mercantiles que habían realizado operaciones comerciales con las empresas pantalla controladas por testaferro en los últimos dos ejercicios fiscales.
La investigación no se da por finalizada ya que la policía ha intervenido gran cantidad de documentación de carácter mercantil relacionada con la facturación fraudulenta de diferentes sociedades, que se analizará en las próximas semanas.
Todos los imputados, naturalmente,
han quedado en libertad con cargos tras declarar en sede judicial.